Perfora tu relación con las tecnologías: Internet Feminista y gobernanza
Florencia Goldsman
Modificar la relación que tenemos en el cotidiano con las tecnologías, cuestionarlas, distribuir el poder que nos otorgan. En especial si tenemos pleno derecho de acceso, aún un privilegio en América Latina, y luego si tenemos competencias para usarlas y explotar su máximo potencial, nos obliga a la acción directa.
Nuestra relación diaria con las TIC merece preguntas como taladros. Debemos horadar nuestro cotidiano digital y así fortalecer la reflexión al interior de los activismos. Es necesario irrumpir, perforar, atravesar la relación naturalizada (y a veces superficial) que asumimos respecto de la multiplicidad de dispositivos tecnológicos, las prótesis digitales con las que coexistimos. Cuestionamientos sobre la toma de posición política y también las ganas de compartir, construir agendas concretas surgidas desde los debates por una internet con espacio para todxs.
Creemos fundamental pensar el cuerpo en línea con rupturas y continuidades acerca de nuestra circulación en el espacio público.
El 2º Encuentro Imagina Internet Feminista, realizado en Malasia durante el pasado mes de julio fue una experiencia de apertura de preguntas, de esas que hacen agujeros en el pensamiento y en la experiencia. Afectividades tecno-políticas que nos atraviesan de parte a parte. Un entrecruzamiento de problemáticas nada fácil de resolver, partiendo de la urgencia desmantelar al patriarcado desde una internet feminista que no puede ser concebida si no trabaja para que el acceso y el uso seguro de las TIC (Tecnologías de Información y Comunicación) se amplíe a más mujeres y personas LGBTIQ. Para trabajar, vivir y trabajar en espacios seguros, colaborativos que fortalezcan nuestras comunicaciones en línea y de carne y hueso.
Podríamos pensar este debate como un tapiz digital que entreteje el feminismo, la tecnología y nuestros derechos humanos en internet. Que anuda pendrives, violencias, sexualidad, deseos libertarios, identidades múltiples. Un ejercicio de hilar y perforar la superficial relación con la tecnología, el cuerpo y las herramientas digitales (aplicativos, plataformas, hardwares, softwares). ¿Qué es la internet? ¿Qué significa el feminismo? ¿Cómo politizamos nuestra relación con las tecnologías desde la defensa de nuestros Derechos Humanos?
El encuentro en Malasia constituyó un ejercicio de reflexión de tres días, ligado a varios meses de escritura, reflexión compartida y construcción en proceso (continúa y es adaptable a los debates de todas las comunidades que sientan la necesidad de abrir estas líneas de cuestionamientos tecnopolíticos). Un tiempo para pensar sobre nuestros pasos y redirigir nuestras acciones para el cambio social.
El empoderamiento de las mujeres en el uso y producción de las tecnologías es un pilar básico en relación con la investigación-acción en el tema de TIC y sociedad.
Precisamos de esta excavación política que a partir de preguntas nos ayude a indagar en nuestros derechos a la libre expresión en una internet que evidencia cada día más misoginia digital. Perforar nuestras prácticas políticas y poner en cuestión las tutelas, persecuciones y vigilancias por parte de los Estados y las empresas sobre nuestros datos, hábitos y consumos. Ayudarnos a llenar los vacíos que dejan las preguntas con tomas de decisión informadas sobre nuestros cuerpos de carne y hueso, y de bits. Reivindicar al fin el poder amplificador de internet para difuminar narrativas múltiples, amantes del disenso y creadoras agendas por mayores autonomías.
La gobernanza es una cebolla
A continuación del encuentro #ImaginaInternetFeminista en Malasia, algunas de las participantes latinoamericanas participamos también del encuentro Gigx en la ciudad de México. Por que para poder cuestionar con mayor precisión e imaginar una internet inclusiva, igualitaria y potenciadora de las libertades… pst pst ¡primero debemos entender cómo funciona! Este compromiso es fundamental y más urgente en tanto se abren diversos espacios de discusión como los diferentes foros de gobernanza (IGF), como el LACIGF8 que tuvo lugar el 3 y 4 de agosto pasado en Distrito Federal.
Es indiscutible que la violencia de género que ocurre en el mundo offline se reproduce también en el online.
Hicimos un gran ejercicio de traducción para entender cómo viajan nuestros datos por los túneles de internet. Desde cuáles son sus diferentes capas a nivel de infraestructura, protocolos y contenidos hasta la urgencia entender que “la nube” está situada en la tierra y en el mar. Recordando que sin apoderarnos de conceptos básicos que orientan las discusiones, otra vez mujeres y personas de las disidencias sexuales quedaremos por fuera de los procesos de tomas de decisión. Percibimos que si los movimientos de mujeres no encaran el debate sobre derechos a la comunicació, se entumecen y corren el riesgo de volverse conservadoras.
Cuestionamos entonces los diferentes tipos y calidades de acceso que tenemos a las tecnologías, con la premisa de hacerlo desde una interseccionalidad que problematice desde la clase, el género, la raza y las diversas identidades hasta pensar nuestra inclusión en la creación de tecnologías.
Nuestros debates buscan también señalar pros y contras del uso de redes sociales-comerciales- masivas orientadas al cambio político. ¿Cuánto cambian la lógica de los discursos? ¿De qué manera celebran ciertas individualidades en lugar de las luchas colectivas? ¿Cuánto facilitan auditorías reales de lo que nuestros funcionarios públicos hacen en sus cargos?
Hicimos, a la vez, parte de una discusión en un contexto sociopolítico mexicano plagado por asesinatos, feminicidios y un elevado ataque a la libertad de expresión, en correspondencia con el aumento del ciberacoso que sufrimos. Así mismo necesitamos repensar nuestro derecho a la memoria como mujeres latinoaméricanas para enriquecer y polemizar en los debates de “Derecho al olvido”, comprender las responsabilidades de los intermediarios en internet y poder construir nuevas agendas con preguntas actuales y atinadas.
Explicar qué significa una internet feminista nos obliga a pensar entrar en los temas gobernanza de internet de varias responsabilidades y desafíos. En principio: comprometernos en un ejercicio de traducción pero también cuidar de nuestro derecho a la privacidad, exigir el acceso universal desde la diversidad, construir espacios públicos digitales libres de violencias, defender la neutralidad de la red y potencializar internet para la divulgación de contenidos feministas. Ser parte de la toma decisión de las agendas digitales y compartir un conocimiento técnico, específico y encriptado y hacerlo asequible en nuestras comunidades.
La tecnología y nuestra relación política, íntima, diaria con ella es materia urgente para ser divulgada en términos que puedan ser leídos, absorbidos y retroalimentados por la sociedad civil en su completa diversidad. Nuestro objetivo es seguir abriendo hendiduras en una superficie que parece sellada. Atravesarla con acciones y respuestas que posibiliten mayores derechos para todxs.
Notas:
