La Jornada Continental por la Democracia y contra el Neoliberalismo es un proceso de articulación que nació en 2015, y desde entonces se mantiene activo, en la búsqueda de alternativas al neoliberalismo y en defensa de las democracias del continente. Una articulación que reúne movimientos sindicales, campesinos, indígenas, feministas, ambientalistas y anticapitalistas del continente.
Más de 3.000 compañeros y compañeras llegaron de todos los países de las Américas y marcharon junto a trabajadores y militantes de Uruguay, en medio de un paro parcial definido por la central sindical uruguaya, el PIT-CNT, para apoyar la movilización de este encuentro.
Se contó también con la participación de Laura Cáceres, hija de Berta Cáceres Flores, la activista hondureña asesinada en 2016 por defender los ríos. Laura contó acerca del caso de su madre y la grave situación de derechos humanos que se vive en Honduras. También sobre la lucha del COPINH.
Uno de los momentos esperados del encuentro fue cuando la batucada de la Marcha Mundial de las Mujeres acompañó la entrada a la tribuna del expresidente y senador de la República del Uruguay Pepe Mujica, quien llegó para participar en el panel “Seguimos en lucha: desafíos frente a la ola conservadora y los ataques a la democracia”, junto a la directora del Instituto de Filosofía de Cuba, Georgina Alfonso, y Cindy Wiesner, de Grassroots Global Justice, ambas también de la Marcha Mundial de Mujeres, así como con Víctor Báez, secretario general de la CSA y Cony Oviedo de CONAMURI, Paraguay.
Los integrantes de la mesa hicieron un análisis del avance del neoliberalismo y los desafíos que tienen los pueblos en lucha. Mujica comenzó admitiendo su obligación de reconocer la diversidad social que caracteriza la composición de la Jornada Continental como proceso y el Encuentro de Montevideo y lo que ello representa ante el desafío de saber conjugar las diferencias para sostener una unidad en la diversidad.
“Es importante lo que hacemos y más importantes son los que quedan luego de nosotros”, dijo Mujica refiriéndose a la necesidad de que las transformaciones sean sostenidas y crecientes, y no necesariamente dependan de un determinado gobierno de tránsito en el poder. Además hizo alusión al capitalismo como un sistema con la capacidad de generar una cultura egoísta de la que es muy difícil escapar. Aún cuando un gobierno puede llegar al poder con un proyecto de justicia para todos es posible que no logre satisfacer las demandas generadas por esta cultura capitalista. “El progreso global colectivo de la sociedad es la mayor garantía de felicidad”, expresó, al tiempo que reconoció que la lucha por la soberanía y la independencia son la expresión del viejo grito jacobino por la igualdad.
Un desafío similar fue planteado por la luchadora norteamericana Cindy Wiesner quien expuso los retos que hoy tienen los sectores progresistas en los Estados Unidos. “Estamos en lucha contra los supremacistas blancos, contra la misoginia”, expresó, y resaltó que la lucha del pueblo norteamericano está creciendo y es permanente. Justo sobre la importancia de pensar el sentido de la lucha y estudiar el capitalismo contra el que luchamos habló Georgina Alfonso, quien insistió también en que el Encuentro de Montevideo representa una continuidad de procesos de resistencia anteriores.
El encuentro también contó con el saludo de Lula Da Silva líder político brasileño quién envío un mensaje de solidaridad a las Jornadas.
Los debates
Las mesas estaban repartidas en diferentes carpas que estaban instaladas dentro del Velódromo de Montevideo. Por las noches, diferentes grupos musicales tocaron para quiénes querían quedarse. Se respiró un ambiente de unidad, dónde se dió mucha importancia a la construcción del tejido social, fortaleciendo las diferentes luchas. Las jornadas estuvieron marcadas por 4 ejes de trabajo y reflexión:
Integración de los Pueblos
Democracia y Soberanía
Libre Comercio los ataques del capital contra la vida
Resistencias populares frente al poder de las transnacionales
Cada uno contó con paneles y mesas de trabajo cuyos resultados fueron llevados a la declaración final del encuentro.
La relatoría de las actividades de las mesas han sido puestas en el blog del encuentro Seguimos en Lucha, aquí podemos ver una guía de su contenido:
En este encuentro sucedió la Convergencia de Comunicación, un grupo de personas de diferentes movimientos que están vinculadas a la comunicación y las tecnologías. Desde este grupo se realizaron todas las acciones de comunicación del encuentro y se generaron confianzas entre las diferentes personas, proyectando también la importancia de incluir una internet libre y el uso de tecnologías libres.
Esto impulsó que como parte de la declaración final del encuentro se incluya a una “internet libre” y las “tecnologías libres”, marcando así un precedente en declaraciones políticas desde los movimientos sociales a nivel continental:
Continuaremos impulsando la articulación de nuestros medios alternativos y populares bajo una estrategia de comunicación coordinada y también sostendremos la lucha por la democratización de la comunicación en cada uno de nuestros países como una forma de limitar el poder mediático en la región. Enfrentaremos el poder de las transnacionales defendiendo la internet libre y las tecnologías libres.
Intervención de la Colectiva CódigoSur en plenaria final
La Colectiva CódigoSur, que participó en el encuentro con el apoyo de APC, realizó una intervención en la plenaria final a favor de la inclusión de una internet libre y el uso de tecnologías libres. A continuación reproducimos ésta intervención:
Compañeras y compañeros, gracias por este espacio para las intervenciones.
En estos días hablamos sobre las transnacionales y es importante que tengamos en cuenta que hoy en día las transnacionales mas grandes y poderosas del mundo son de tecnologías. Hablamos de Alphabet, de Apple, de Microsoft, y es sumamente necesario incorporar el eje de las tecnologías en las luchas de los movimientos sociales. No podemos seguir siendo acríticos en relación al uso que hacemos de las tecnologías. Ellas controlan y vigilan cada vez más nuestra vida. Las transnacionales de la tecnología definen los dispositivos que usamos y quién puede acceder a ellos. Usan nuestra información como minerales preciosos. Hacen minería de datos con nuestros perfiles y nuestras comunicaciones y las venden a empresas y gobiernos.
Internet no es Facebook. Internet no es Google. No debemos dejar que la Internet se privatice, debemos luchar por un acceso universal y de calidad, comunitario, creado por la gente, sin censuras. Una red abierta y comunitaria, que respete nuestra privacidad y nuestros derechos humanos.
Usemos software libre, es urgente y necesario. Cifremos nuestras comunicaciones. Debemos protegernos digitalmente. Es necesario que aprendamos nuevos hábitos de uso, que no tengamos pereza de aprender.
Este debe ser un eje de nuestros encuentros y de la refundación de nuestros movimientos y de un mundo nuevo.
No a las transnacionales de la tecnología. No a la minería de datos.
Si a las tecnologías libres, y si a herramientas propias que nos permitan avanzar y dar la batalla en esta disputa histórica.
