La red en femenino

Lourdes Muñoz

Hay un momento importante en la vida de muchas mujeres y así ocurrió en la mía, en que la reflexión en torno a la condición femenina me llevó a saberme feminista.  Posteriormente comprendí que el feminismo no podía ser sólo una actitud  individual, era absolutamente necesario el trabajo en red, la complicidad entre mujeres, para lograr nuestros objetivos.

Considero que además de trabajar con aquellas mujeres que piensan como una misma, es esencial dar un paso más allá y crear espacios de encuentro entre mujeres con diferentes responsabilidades, de distintos ámbitos y, sobre todo, con diferentes visiones, para trabajar con objetivos comunes que contribuyan a la igualdad real de las mujeres. Espacios para poder encontrarse, conocerse y compartir porque la diversidad de las mujeres es positiva y nos enriquece.

Plantearé esta reflexión desde tres niveles que se suceden y se complementan al mismo tiempo:
Primero: El de ser feminista y comprometerse de forma personal con el feminismo. 

Segundo: El de agruparse con aquellas mujeres  que piensan como una misma o que actúan en el mismo ámbito. 

Tercero: El de encontrarse y ser capaces de hacer estrategias comunes, para fines concretos que compartimos, con otras mujeres de otros ámbitos i/o con otra visión del feminismo.

Es cuestión por tanto de ir más allá de la lucha individual o la colectiva desde el grupo de iguales a poder plantear y asumir algunos retos conjuntamente desde una perspectiva de colaboración más amplia.

La diversidad de las mujeres feministas es positiva y nos enriquece. Resulta fundamental que tengamos clara la necesidad de estos espacios, “espacios” en plural porque deben ser múltiples espacios: mujeres políticas, mujeres del ámbito de la comunicación, mujeres de feminismos diversos, mujeres del ámbito asociativo y/o sindical capaces de trasladar en algunos casos la indignación ante un hecho donde no nos sentimos incluidas a trabajar conjuntamente para que las mujeres, en plural, estemos representadas y construir estas inclusiones desde el trabajo serio y común, contemplando propuestas y visiones diferentes.

Ocurre con frecuencia que las mujeres tenemos dificultades para reservar en la agenda el tiempo imprescindible para participar en estos espacios comunes. Es necesario encontrarlo, aún a pesar de la dedicación que requieren nuestros propios proyectos, porque ese tiempo que en teoría restamos, se multiplicará y revertirá beneficiosamente en los proyectos propios y en el avance global.

Además, incluso desde una visión particular, es fundamental este espacio para fortalecernos cada una en nuestro propio proyecto, y para que estos sean más potentes con la aportación y el apoyo de otras mujeres. Si solo vamos dando pasos desde la individualidad los avances seguirán siendo lentos; con la complicidad entre mujeres los pasos serán más rápidos y sobre todo más firmes.

Existen nuevas fórmulas, además del contacto personal, que facilitan la existencia de estos espacios, haciendo posible una relación más habitual e inmediata: las TIC (tecnologías de la información y la comunicación).

Las redes de mujeres

La Red /Internet es genuinamente un espacio femenino, un espacio ideal para las mujeres. Esta afirmación puede parecer polémica e incluso contradictoria con algunas reflexiones feministas críticas con la red, o ante la evidencia del dominio masculino que también  se produce en la red, o simplemente ante los datos reales de los contenidos y la proporción de mujeres que se conectan.

Evidentemente en la Red la presencia femenina aún no es equilibrada hoy en día a pesar de que aumentan constantemente las mujeres que navegan por ella y en Canadá y Estados Unidos ya están a punto de ser las usuarias mayoritarias.

Considero por tanto que la red, debido a su diseño y concepción original, es ideal para ser un espacio eminentemente femenino. Hemos reflexionado sobre las dificultades de las mujeres para participar en las organizaciones mixtas tal y como se han concebido tradicionalmente: de forma jerárquica. Pero no solo podemos participar a través de la red, debemos participar y lo podemos hacer con toda comodidad, y ejerciendo de la forma que hemos aprendido las mujeres. A lo largo de la historia, las mujeres han ido tejiendo redes personales y vecinales que han mantenido los vínculos de las estructuras familiares y sociales.

Las TIC suponen una oportunidad para todas y ofrecen posibilidades y usos diversos: contactar con otras personas, crear grupos de relación y de interés, formar redes y especialmente facilitar un espacio donde generar y acceder a la información de forma alternativa, superando algunos aspectos que en la sociedad actual suponen una dificultad para las mujeres: la falta de tiempo (doble jornada, inadecuación de los horarios laborales y familiares, etc.) y la histórica invisibilidad de la mirada de las mujeres.

Esto supone una oportunidad para todas las mujeres y en concreto para las comprometidas con el feminismo, la oportunidad en general de fomentar encuentros, intercambiar opiniones y también de impulsar proyectos.

A través de la Red se genera y difunde opinión,  incluso se han cambiado las posturas de los gobiernos, y las MUJERES debemos participar activamente en ella, debemos construir espacios, pero fundamentalmente intercambiar, y crear verdaderas redes de mujeres, espacios comunes donde confluyan diversas opiniones, donde compartir información, y que potencien el pensamiento, las ideas y los proyectos que impulsen la igualdad de oportunidades en nuestro entorno.

La red, como herramienta difusora y generadora de opinión, es un espacio político-social ya que sirve para que las organizaciones amplíen sus ámbitos, y contrasten opiniones con otras personas.

Esta última sería una visión muy limitada y parcial  de la red,  ya que es unidireccional, desde una organización hacia las personas, de dar información, o de saber la opinión ante una propuesta. Su gran potencialidad radica en ser un instrumento para generar pensamiento y conocimiento (construir y contrastar opiniones) y también para la actuación (difundir y movilizar entorno a una idea), convirtiéndose así en un gran espacio de la ciudadanía.

En estos dos últimos párrafos he hablado en neutro voluntariamente me he referido a personas o a ideologías. Porque realmente tengo la convicción de que esta potencialidad de la red sirve para cualquier movimiento.  Las organizaciones que verdaderamente tengan estrategia y visión verán en la red esta oportunidad y la utilizarán. Y las organizaciones de mujeres debemos tener esta visión y no perder de ningún modo esta oportunidad que tenemos.

Redes de mujeres políticas: por el empoderamiento de las mujeres

Las mujeres políticas también debemos crear redes: espacios donde compartir proyectos, conocer buenas prácticas, coordinarnos … en definitiva, estar informadas y a la vez informar de nuestros proyectos: tejer REDES para el empoderamiento de las mujeres.

Este es sin duda un instrumento especialmente útil para superar diversas dificultades de las mujeres en el ejercicio de la política, hay dos parámetros claros presentes en  estas dificultades que son: el tiempo y  la información. 
 
Algunas dificultades que las mujeres con responsabilidades políticas se encuentran son:

1. Visibilidad.  La falta de visibilidad pública que tiene su figura y actividad política, especialmente en el exterior: en los medios de comunicación.

2. Agenda política. Los temas que más frecuentemente asumen como responsabilidades políticas las mujeres (todos aquellos relacionados con el bienestar de las personas, por lo tanto pasamos a responsabilizarnos en el ámbito público de los aspectos más relacionados con el ámbito privado) no son las prioridades de la agenda política ni de los partidos, ni de los medios de comunicación, por tanto las invisibiliza.

3. Dinámicas políticas que hacen difícil la compatibilidad con la vida privada.  Las dinámicas basadas en valorar como fundamental la presencia, la acumulación de reuniones, hacen enormemente difícil compatibilizar la actividad política con la vida privada (familiar, ocio, amistades).  Este es un dilema delante del cual se encuentran especialmente las mujeres sino quieren perder su vida personal.  Esto deriva en dos situaciones:  la de compatibilizar la vida pública y privada; y la de la desigualdad con los propios compañeros, que la mayoría de veces, tienen resueltas las obligaciones de la vida privada.

4. Espacios de toma de decisión.  Aunque existen espacios de decisión con una presencia  paritaria de mujeres sucede que casi nunca participan de los espacios de decisión informales: aquellos donde se decide la agenda, las prioridades o incluso donde se acaban de concretar las decisiones planteadas previamente en las reuniones formales.

Sin duda un parámetro claro en las barreras que las mujeres con responsabilidades políticas tienen es el tiempo. La gran mayoría de mujeres con un compromiso político no tienen una dedicación exclusiva en su actividad política, se dedican a ella de forma voluntaria, y por lo tanto padecen la triple jornada entre la dedicación profesional,  personal y política.

Otro parámetro que actualmente aparece en las barreras para el empoderamiento de las mujeres que se dedican a la política es la información. Es bastante conocida la frase “la información es poder”, esta frase es especialmente cierta en el ejercicio de la política, en la cual para ejercer hay que estar bien informada, para estar al día de los acontecimientos de actualidad, conocer medidas y propuestas de  las instituciones. Esta información es esencial para poder realizar proyectos eficientes y eficaces, aprendiendo de otras experiencias. 
 
Pero además existen en las grandes organizaciones, entre ellas los partidos, espacios informales de información y decisión. Estos espacios surgen de las relaciones personales y políticas, surgen con el tiempo y la confianza; estos espacios informales están casi exclusivamente formados por hombres. Por una razón muy simple la mayoría de las  mujeres que actualmente tienen responsabilidades,  llevan relativamente muy poco tiempo en el cargo (1 ó 2 mandatos) y no estamos en estos espacios informales de información y decisión.

Hay la dificultad específica de que las mujeres con responsabilidades aparezcan en los medios, así como que aparezca información sobre sus proyectos políticos. Con lo cual, hay un problema de visibilización.

Debemos crear redes para conseguir un empoderamiento de las mujeres con responsabilidades políticas. La Red es una herramienta clara para superar las dificultades de las mujeres en  la política, especialmente: tiempo, acceso  a la información y visibilidad de nuestros proyectos.

Una experiencia concreta: una red de políticas

A raíz tanto de la convicción expresada anteriormente sobre la virtualidad y oportunidad que suponen las TIC para las mujeres y para las organizaciones de mujeres, como del análisis de las dificultades de las mujeres en el ejercicio de la política, desde la Secretaria de la Mujer de mi partido adoptamos como un eje clave del trabajo político  una estrategia de comunicación, utilizando las TIC como medio alternativo, tanto como instrumento de relación con la sociedad y en concreto con las mujeres, como espacio interno de relación entre mujeres políticas.

Este proyecto se concreta en dos espacios complementarios y con objetivos diferentes:

1. Web de las Mujeres socialistas: ámbito dona de la web del PSC (espacio abierto) 

2. Red de mujeres del PSC (ámbito restringido para las mujeres con responsabilidades orgánicas i/o institucionales del partido)

1. Web de las mujeres socialistas

Específica de temas de género dentro de la web del PSC. El objetivo general es que sea un espacio de referencia para las mujeres progresistas de Cataluña. Se basa en la difusión de las iniciativas políticas propias en materia de igualdad que se trabajan desde los diferentes ámbitos (institucionales y orgánicos), la difusión de opiniones y demandas de los diversos movimientos de mujeres así como la difusión en general de noticias aparecidas en los medios de comunicación y documentos que puedan ser de especial interés para las mujeres.

2. Red de Mujeres del PSC

Red de acceso restringido a la cual pertenecen mujeres con responsabilidades políticas institucionales (parlamentarias, concejalas…) así como orgánicas (secretarias de la mujer de federaciones…), las mujeres que pertenecen al Consejo de Mujeres del partido y aquellas mujeres interesadas que han pedido acceso.

Esta red esta concebida como una forma de hacer política en femenino, como una red plana, siendo una clara herramienta para compartir información, experiencias y recursos entre las mujeres con el objetivo de hacer “mejor” política y de empoderar a las mujeres con responsabilidades. Contiene información de utilidad para las mujeres que desarrollan una tarea política: buenas prácticas, documentos de referencia en temas de igualdad de oportunidades, herramientas para el trabajo y la formación interna, etc. El principal valor es la participación de las miembras de la red enviando informaciones i iniciativas propias.

En conclusión, pienso que la  red es un espacio de la ciudadanía y una gran herramienta, en la que las mujeres debemos actuar, no podemos perder esta oportunidad, pensar y observar a la defensiva simplemente porque es un espacio mayoritariamente masculino. No debemos solamente reivindicar espacio y presencia, somos muchas y diversas, debemos actuar: incluirnos tomando y creando espacios y, organizarnos en redes para empoderarnos.

Estoy segura de que esto redundará en el beneficio no sólo de las mujeres participantes sino de toda la sociedad. 


Intervención realizada en las Jornadas “Mujeres y Nuevas Tecnologías“ organizadas por la UNED – 10 mayo 2002 


Ver el artículo en el sitio web de Mujeres en Red

Dejar una respuesta